Vacuna AstraZeneca – Efectos secundarios de síndrome de trombosis
La vacuna AstraZeneca , ha sido gravemente cuestionada por Un grupo de vacunados que han llevaron a la empresa farmacéutica a los tribunales en el Reino Unido. Los demandantes alegan que sufrieron el síndrome de trombosis con trombocitopenia (TTS) tras recibir una dosis de esta vacuna.
Los demandantes sostienen que el antígeno desarrollado en colaboración con la Universidad de Oxford provocó una reacción adversa relacionada con la coagulación de la sangre y un recuento bajo de plaquetas. Citan alrededor de 51 casos y exigen una indemnización conjunta por daños y perjuicios valorada en más de 125 millones de dólares.
El diario The Telegraph señala que el primer caso denunciado ante el poder Judicial de Reino Unido fue el de Jamie Scott, quien sufrió una lesión cerebral irreversible tras la formación de un coágulo de sangre y una hemorragia cerebral. Sus familiares alegan que las afectaciones comenzaron después de que fue vacunado en abril de 2021 con el biológico de AstraZeneca. La compañía desestimó el argumento en una carta enviada a los abogados de Scott en mayo del año pasado. “No aceptamos que el TTS sea causado por la vacuna a nivel genérico”.
La empresa farmacéutica admitió en febrero que su formulación “puede, en casos muy raros, causar TTS”, tal y como expresó en un documento legal sometido ante el Tribunal Supremo que lleva la demanda. La Corte superior del Reino Unido esta tramitando de 51 casos de personas que afirman haber sufrido estos cuadros o sus familiares. Este reconocimiento abre la puerta a una compensación de hasta 100 millones de libras (unos 117 millones de euros) para los afectados.
Vacuna AstraZeneca y el síndrome de trombosis
EEl TTS o sindrome de trombosis con trombocitopenia, consiste en la formación de coágulos sanguíneos y un bajo conteo de plaquetas entendidas como cellas de coagulación.
Un recuento de plaquetas inferior a 150.000 incrementa el riesgo de hemorragias, que pueden manifestarse tanto internamente como en la superficie de la piel. La gravedad de las hemorragias aumenta a medida que el recuento de plaquetas disminuye y pueden ser potencialmente mortales, especialmente si ocurren en el cerebro.
La detección y tratamiento oportunos son clave para prevenir complicaciones serias asociadas a esta afección.
- Dolor de cabeza grave o persistente, visión borrosa, confusión o convulsiones (ataques).
- Dificultad para respirar, dolor torácico, hinchazón de las piernas, dolor en las piernas o dolor abdominal persistente.
- Moratones inusuales en la piel o manchas redondas puntiagudas más allá del lugar de vacunación.
Los otros efectos secundarios de la vacuna de AstraZeneca
El laboratorio registra, además, otros posibles efectos secundarios, de mayor a menor probabilidad. Los efectos secundarios muy frecuentes pueden afectar a 1 de cada 10 personas e incluyen:
- Sensibilidad, dolor, calor, o rasquiña en el sitio de aplicación de la inyección.
- Sensación de malestar general.
- Sensación de cansancio (fatiga).
- Escalofríos o sensación febril.
- Dolor de cabeza o mareo (náuseas).
- Dolor en las articulaciones o en los músculos
Entre los síntomas frecuentes (pueden afectar hasta a 1 de cada 10 personas) se encuentran la inflamación o enrojecimiento de la zona de aplicación, la fiebre, el vómito o diarrea, dolor en las piernas o brazos y síntomas gripales (alta temperatura, dolor de garganta, secreción nasal, escalofríos…).
Los efectos secundarios poco frecuentes afectan a 1 de cada 100 personas e incluyen somnolencia o sensación de mareo, dolor abdominal, ganglios linfáticos agrandados, sudoración excesiva, picazón en la piel, erupción cutánea o urticaria.
La vacuna puede causar reacciones alérgicas graves en algunos pacientes, así como hinchazón severa de los labios, la boca y la garganta, si bien son experiencias extremadamente raras.
A partir de un estudio global en el que participaron 99.000.000 de personas de ocho países distintos, se identificaron dos efectos secundarios poco frecuentes, pero nocivos, de las vacunas contra el covid-19, lo que representa un avance importante en el control médico de las personas inmunizadas.
Un grupo de investigadores que colaboran con la red GVDN (Red Mundial de Datos sobre Vacunas), con sede en la Universidad de Auckland (Nueva Zelanda), evaluaron 13 afecciones neurológicas, sanguíneas y cardíacas para determinar si el riesgo de padecerlas es mayor después de recibir una vacuna en contra del covid-19.
En un estudio, se analizaron los datos anonimizados de millones de personas que recibieron la vacuna contra el covid-19 y la probabilidad de un mayor riesgo de enfermedad en diferentes periodos después de la inoculación, y antes de que la vacuna estuviese disponible.